Actualmente existe una demanda en el creciente mercado de criptomonedas y sus tokens distintivos, que se espera que sean la próxima gran novedad que pueda revolucionar el day trading. Estas criptomonedas, además de la tecnología que las respalda, deben tenerse en cuenta por sus resultados en el mercado.
Bitcoin (BTC): la criptomoneda original
Al ser el primer y más popular tipo de moneda digital, Bitcoin (BTC) sigue siendo el rey del mercado de criptomonedas. Estos atributos se han visto respaldados por su naturaleza escasa y su creciente aceptación entre las instituciones. Además, Bitcoin tiene un impacto en todo el espacio de las criptomonedas, ya que su precio suele definir la dirección de todo el mercado.
Toncoin (TON): la revolución de la cadena de bloques respaldada por Telegram
TON o Toncoin se ha vuelto popular debido a su asociación con la red abierta Telegram. TON fue diseñada inicialmente por los desarrolladores de la plataforma de mensajería Telegram y está diseñada para ofrecer soluciones de alto nivel y eficientes basadas en la cadena de bloques. Telegram tiene muchos usuarios y, por lo tanto, a través de este proyecto, ha seguido ganando más usuarios y participación de mercado.
Binance Coin (BNB): impulsando el ecosistema de Binance
Binance Coin es el token fundamental utilizado en el ecosistema de Binance. Originalmente se lanzó como criptomoneda nativa para pagar tarifas de trading más bajas. Esto ha hecho que BNB surja como el token para varias dApps.
Cardano (ADA): el rigor académico se une a la innovación de la cadena de bloques
ADA tiene un método para diferenciarse de otras criptomonedas establecido al priorizar la investigación en este tipo de blockchain. Cardano fue desarrollado por Charles Hoskinson, uno de los cofundadores de Ethereum, y enfatiza el valor del proceso de revisión por pares y las matemáticas.
TRON(TRX): Descentralización de la distribución de contenidos
TRON (TRX) utiliza la tecnología blockchain para transformar el intercambio de contenido en Internet. El modelo propuesto permite a los creadores de contenido llevarlo directamente a los consumidores, una situación que puede resultar perjudicial para los intermediarios de los medios de comunicación. Además de eso, TRON ha ido más allá en su consolidación en el intercambio de contenido descentralizado a través de la compra de BitTorrent.